¿Te has preguntado qué es la trazabilidad y cómo esta protagoniza los procesos que se encaminan hacia la sostenibilidad social y medioambiental? ReciVeci es una startup ecuatoriana que se ha propuesto ubicar a la sostenibilidad sobre la mesa como una prioridad para las personas y las empresas.
En los últimos tiempos se ha vuelto relevante conocer cada una de las etapas de vida que tiene un producto —desde su origen hasta el final—, ya que esto permite comprender si existe la posibilidad de establecer mayor eficiencia en la productividad, evitar posibles incidencias negativas para el entorno, fomentar la sostenibilidad y asegurar el mínimo impacto posible para el ambiente. En este sentido, la trazabilidad juega un papel importante, porque da a conocer el historial completo de un producto y su calidad. Este concepto es aplicable a varios campos productivos: agricultura, tecnología, alimentación, y por supuesto el reciclaje.
Pero entender la trazabilidad como concepto no es suficiente: para ponerlo en práctica hay que ser consecuentes con una serie de acciones, y es eso lo que ReciVeci ha logrado. La startup ecuatoriana ha generado todo un sistema para gestión de residuos, entendiendo a los recicladores de base (personas que se dedican a la recuperación y venta de materiales reciclables en el flujo de residuos sólidos, normalmente trabajan bajo condiciones precarias e inseguras) como un core del sistema, valorando su trabajo y tomando a la tecnología como aliada para conectar a todos los actores de la cadena con un propósito claro: hacer de la gestión de residuos un proceso real y efectivo que alcance a todos los rincones del país.
Además, ReciVeci ha puesto a disposición la ReciApp: la primera herramienta tecnológica, innovadora y social de reciclaje en Ecuador, que permite a la ciudadanía y empresas aprender a reciclar adecuadamente de una forma sencilla desde el teléfono móvil conectando directamente con los recicladores y recicladoras de base.
Además, la gestión se sustenta en Recircular, una plataforma que se actualiza y genera constantemente datos sobre la recepción de material de puntos generadores (centros de acopio), recepción de material de recolectores y despliega listas de transacciones pendientes en el proceso de reciclaje.
La trazabilidad permite tomar decisiones inteligentes para evitar o disminuir la emisión de gases de efecto invernadero, conservar recursos naturales como el agua, el suelo y minerales, disminuir el uso de energía en la producción de materias primas e incluso para reducir la contaminación.
Actualmente, ReciVeci cuenta con más de 10 mil usuarios en 11 provincias del Ecuador, 30 mil ciudadanos han sido sensibilizados sobre los procesos de reciclaje y existe un mapeo de más de 700 recicladores. Reciclar con ReciVeci es cuidar el entorno y, además, garantizar condiciones justas de trabajo para todos los actores de la cadena de gestión de residuos. Por otro lado, varias empresas (nacionales y multinacionales) se han sumado a ReciVeci con el fin de incentivar la adecuada gestión de residuos en las comunidades en las que impactan, motivando el reciclaje como una acción no solo de responsabilidad sino de verdadera conciencia social y corporativa.
El final del proceso de trazabilidad varía según el material, por ejemplo; para el acero y el aluminio, que son 100 % reciclables, es decir, que se los puede reciclar infinidad de veces sin que pierdan sus propiedades, termina cuando estos entran en fundición. En el caso del plástico: residuo barato, duradero, fácil de manejar, adaptable y complejo, su trazabilidad contribuye en mejorar la sostenibilidad ambiental, ya que sin duda, reciclar plástico es un proceso desafiante.
Trabajar en acciones que promuevan y fomenten el reciclaje contrarresta el cambio climático, impulsa la economía circular —cuyo principal objetivo es el de crecer económicamente sin deteriorar el medioambiente y sus recursos naturales— y deja una huella favorable en el desarrollo social, ambiental y económico.